cumpleaños

¡Hoy fue mi cumpleaños! ha sido un día perfecto desde mis sueños, hoy, pude soñar tranquilamente, dormir y dormir, levantarme tan tarde como no lo había hecho en años, descansar, tener tranquilidad, después despertar lentamente amodorrada en mi cama tan suave y con esos cubre cama tan acolchonaditos que me pedían en combinación que no los abandonara, y así lo hice hasta que por fin la curiosidad pudo ganarme, descubrir que otras maravillas me depararía este día.
Al levantarme decidí tomar un baño de espuma, tan rico y calientito, sí, seria perfecto así que abrí la llave de agua caliente esperando que pronto se llene la bañera mientras preparo todo lo necesario, busco las sales marinas y algún aromatizante, ¡velas!, velas también necesito y un libro, no un libro no mejor una copa de vino, de ese español tan rico, vino blanco, si será perfecto.
Una vez todo reunido termino de desnudar mi cuerpo y entro en la bañera con toda la intención de salir con la piel arrugada, siento el calorcito del agua y como me hundo poco a poco, ¡que rico se esta aquí!, ¡ha!, esta sensación de paz, tranquilidad ¡huy! que rico el vino; tomo solo un sorbo no quiero que se acabe, a lo lejos escucho el sonido del bosque, todas las ramas de los arboles con criaturas tan lindas, ardillas pájaros, supongo en ese momento que cuando salga de mi casa tendré ante mi un paisaje de bosque soleado, con el cielo azul y que alguna nube me deje entrever alguna figura, pero mientras tanto, disfruto de la bañera y de todas las cosas que me susurra al oído, estoy que me invita a quedarme, pero ¡no!, tengo curiosidad por saber mas de este día así que con la piel no tan arrugada como quisiera apresuro el paso de mi vino y salgo de la bañera, seco mi cuerpo y me visto con ropa muy cómoda, ropa que compre ayer solo para la ocasión, ¡hoy sera perfecto!, así que una vez vestida me preparo un bocadillo, de esos pequeños, un rico sandwich y me dispongo a salir; tarjetas de crédito, efectivo, llaves, gafas, chamarra pues regresare tarde, todo lo que necesario, creo que no podría ser mejor, es fin de semana, ni mis amigos ni yo trabajamos sábado o domingo, así que al ser sábado hoy pues tenemos todo el fin de semana; como sea me dispongo a salir y al abrir la puerta quede pasmada, mis ojos no podían abarcar todo de una vez, no daba crédito a lo que veía, era hermoso, tal vez casualidad o tal vez que por ser este día estaría yo mas sensible o simplemente que al estar en la bañera ya imaginaba ver el bosque así, pero se veía radiante, muy, no se como explicarlo, muy cristalino aunque un bosque no sea como el agua, es decir por la época se veía muy verde y además el cielo muy azul, olía a miel y resina de los arboles, flores y tan fresco, realmente no se como describirlo, sin embargo era un paisaje hermoso al cual solo le faltaría una cascada o un lago.
En fin, cuando pude salir de mi casa tan lejos de la ciudad a pesar de la criticas de todos y después de recuperar el aliento acto seguido abrí mi cochera y saque mi auto, al ir conduciendo hacia la ciudad corro el capó, casi nunca lo hago, no me gusta ser pretenciosa, presumida o vanidosa pero para que tener un auto convertible si no lo descubres de ves en cuando; bajando por la carretera hacia a ciudad me pregunto si podrán venir todos mis amigos, yo creo que si, llegando a la ciudad veo a una persona vendiendo algodón de azúcar, compro uno, hoy creo que me daré esos gustos pequeños de la vida los cuales nos complementan; hasta el cumplido del vendedor encaja en el día de hoy, quien iba a pensar que un cumplido de un completo desconocido te pueda hacer el día; sonrojada y con la lengua azul sigo mi camino hasta llegar al lugar que acordamos aunque creo que no estarán ahí ya que al revisar mi reloj compruebo que es un poco mas tarde de lo acordado sin embargo al recordar el rico baño creo que valió la pena hacerles esperar, tomo mi móvil de la guantera y lo enciendo, tan pronto como termina el saludo inicial entra una llamada la cual contesto con apresuro, por supuesto se trata de uno de ellos quien con tono regañon pregunta por mi ubicación, a lo cual respondo pidiendo la de ellos y rápidamente me enfilo hacia donde ellos están, una vez ahí es la gloria entre besos abrazos y regalos, globos y un pastel, me siento tan bien, que me encantaría que dure para siempre, fiesta eterna, un buen sueño, todo transcurre con felicidad, es un buen sueño, un buen anhelo, hoy en mi cumpleaños me hubiera gustado que todo eso ocurriera pero no creo que pueda pues llevo secuestrada casi un mes, tengo mucho frío, hambre, me duelen los golpes y las heridas, apenas puedo abrir un ojo, todo mi cuerpo tiene moretones, llagas, y estos grilletes que no me permiten ni acercar mis manos a la cara, todo esta oscuro y huele muy mal, tal vez, tal vez mi regalo de cumpleaños pueda ser la muerte, como me gustaría.